LA EQUIDAD DEL REINO


 LA EQUIDAD DEL REINO

Todos contratados a un denario

MAYO 2025

Parábola de los obreros de la viña

Mateo 20 Porque el reino de los cielos es semejante a un hacendado[a] que salió muy de mañana para contratar obreros para su viña. 2 Y habiendo convenido con los obreros en un denario[b] al día, los envió a su viña. 3 Y salió como a la hora tercera[c], y vio parados en la plaza a otros que estaban sin trabajo; 4 y a estos les dijo: «Id también vosotros a la viña, y os daré lo que sea justo». Y ellos fueron. 5 Volvió a salir como a la hora sexta y a la novena[d], e hizo lo mismo. 6 Y saliendo como a la hora undécima[e], encontró a otros parados, y les dijo*: «¿Por qué habéis estado aquí parados todo el día sin trabajar?». 7 Ellos le dijeron*: «Porque nadie nos contrató». Él les dijo*: «Id también vosotros a la viña». 8 Y al atardecer, el señor de la viña dijo* a su mayordomo: «Llama a los obreros y págales su jornal, comenzando por los últimos hasta los primeros». 9 Cuando llegaron los que habían sido contratados como a la hora undécima, cada uno recibió un denario. 10 Y cuando llegaron los que fueron contratados primero, pensaban que recibirían más; pero ellos también recibieron un denario cada uno. 11 Y al recibirlo, murmuraban contra el hacendado[f], 12 diciendo: «Estos últimos han trabajado solo una hora, pero los has hecho iguales a nosotros que hemos soportado el peso y el calor abrasador del día». 13 Pero respondiendo él, dijo a uno de ellos: «Amigo, no te hago ninguna injusticia; ¿no conviniste conmigo en un denario? 14 Toma lo que es tuyo, y vete; pero yo quiero darle a este último lo mismo que a ti. 15 ¿No me es lícito hacer lo que quiero con lo que es mío? ¿O es tu ojo malo porque yo soy bueno?». 16 Así, los últimos serán primeros, y los primeros, últimos.

 

Para destacar esta idea, cuenta una historia sobre los trabajadores de una viña: “muchos que son primeros serán últimos, y muchos que son últimos serán primeros” (Mateo 19:30).

 

Reflexión: Jesucristo nos enseña que todos estamos invitados a trabajar para extender su Reino. Algunos son llamados desde la edad temprana como Samuel, otros en la edad media, y otros en la edad adulta como Moisés. Dios llama a algunos a seguirle en distintas áreas y no por eso unos son más que otros.

 

1. Contratados al amanecer

Se trata de un propietario (Dios) que se dedica a contratar trabajadores (a todos) para su viña (el Reino).  Debemos tener presente que Dios llama siempre. Pero el SI requiere una actitud de prontitud,  las personas que lo hacen inmediato se destacan por el DON DE SERVICIO. Dios llama y seguirá llamando, a pesar de la oposición para que el llamado de Dios no penetre en el corazón de la persona. Y no solo pensemos en un “contrato” de Dios “temporal” sino “permanente” a trabajar en su viña.

Crónicas 34  DE OCHO años era Josías cuando comenzó á reinar, y treinta y un años reinó en Jerusalem. 2 Este hizo lo recto en ojos de Jehová, y anduvo en los caminos de David su padre, sin apartarse á la diestra ni á la siniestra.

 

2. Contratados al mediodía y al inicio de la tarde

¡Cuántos jóvenes piensan que aún no es tiempo, que más adelante, que son muy jóvenes, pero la palabra dice no tengan por poco tu juventud. 1 Timoteo 4:12 Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza. 1 Samuel 3 El joven Samuel servía[a] al Señor en presencia de Elí.

 

 

3. Contratados al caer la tarde, ya casi era de noche

A todos y cada uno Dios los llama para colaborar y estar con Él. Hay incluso algunos de esta etapa de la vida que han trabajado su vida entera para Dios y para la Iglesia. Algunos habrán incluso tenido altibajos, se habrán alejado de la Iglesia, pero como hijos pródigos han vuelto al redil. Éxodo 7:7-24 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)

Era Moisés de edad de ochenta años, y Aarón de edad de ochenta y tres, cuando hablaron a Faraón.

 

4. La equidad del reino

Unos y otros, los contratados a primera hora y los del final del día, recibirán lo justo, lo acordado en el contrato del patrón. Todos recibiremos lo que merecemos según nuestras obras. ¿Estamos preparados para recibir la paga, si aún no, hay que trabajar más?

 

REFLEXIONEMOS:

En tener  en cada una de las actitudes que se pueden manifestar a la hora del “pago de nómina”.

Agradecer a Dios el ser llamado a cualquier edad, a cualquier tarea,  trabajar con Él para extender su Reino es un privilegio.

META: Agradecer a Dios el don de su bondad al elegirme a formar parte de su Iglesia.

TODOS RECIBIMOS EL MISMO SALARIO

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